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Sven-Goran Eriksson quiere ser recordado como "un buen hombre"

Sven-Goran Eriksson quiere ser recordado como "un buen hombre"

A Sven-Goran Eriksson le gustaría ser recordado como "un buen hombre".

El ex seleccionador de Inglaterra, a quien le diagnosticaron cáncer de páncreas terminal en enero y le dieron menos de un año de vida en el "mejor escenario", ha revelado cómo le gustaría ser recordado después de su fallecimiento en la nueva serie de Amazon Prime 'Sven', que explora sus sentimientos sobre su vida y mortalidad en su Suecia natal.

En un emotivo mensaje de despedida en el documental, el entrenador de futbol de 76 años, valora: "Tuve una buena vida. Creo que todos tenemos miedo del día en que muramos, pero la vida también se trata de la muerte. Tienes que aceptarla como lo que es”.

"Con suerte, al final la gente dirá que era un buen hombre, pero no todos dirán eso. Espero que me recuerden como un tipo positivo que intentaba hacer todo lo que podía.

No lo lamenten, sonrían. Gracias por todo, entrenadores, jugadores, público. Ha sido fantástico. Cuídense y cuiden su vida. Y vívanla. Adiós”, abundó.

En otra parte de la película, Sven recuerda su vida y su familia en un viaje al lago Fryken cerca de su ciudad natal de Sunne en el país escandinavo.

Mientras está de pie junto al agua, reflexiona: “Un lugar hermoso, te tranquiliza. Me tranquiliza. Debajo de la montaña allí creció mi padre. Justo al frente, ese es Thornsby donde crecí. Y Sunne donde nací. Siempre pensé que es un gran lugar para dormir. Las cenizas se pueden arrojar al agua aquí. Me siento como en casa".

El ex futbolista del KB Karlskoga salió anteriormente con la ex estrella de 'Strictly Come Dancing' y 'Celebrity Big Brother' Nancy Dell'Olio, y lleva 15 años con su pareja Yaniseth Bravo, de 54 años.

En el programa, que también incluye comentarios de jugadores a los que ha entrenado, como David Beckham, de 49 años, Wayne Rooney, de 38, Roberto Mancini, de 59, y Kasper Schmeichel, de 37, Sven habla sobre cómo ha aceptado su enfermedad y su tratamiento: "La vida no es al cien por cien. Me han puesto muchas inyecciones durante muchos meses, ahora [los médicos] lo han cambiado por pastillas. Son muchos efectos graves en la garganta y la nariz, pero es parte de ello y puedo vivir con ello. Pero sé que la vida no durará para siempre. Pero estoy bien".

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