El número uno del mundo triunfó en Nueva York después de vencer a Taylor Fritz en sets seguidos en la final el domingo y estaba encantado de asegurar su segundo triunfo en un Grand Slam del año después de que su preparación para el evento estuviera envuelta en controversia después de que se supiera que había dado positivo dos veces por clostebol -un esteroide que puede aumentar la masa muscular- a principios de este año: "Este título significa mucho porque el último período de mi carrera no fue fácil. [La investigación] estaba y todavía está en mi mente. No es que se haya ido, pero cuando estoy en la cancha, trato de manejar la situación de la mejor manera posible. Estoy contento de cómo manejé esto. Estoy emocionado de tener este trofeo conmigo".

Sinner explicó que sintió "más presión" en Flushing Meadows que cuando consiguió su primer major en el Abierto de Australia este año porque había llegado al torneo bajo una nube de dudas: "Aquí fue difícil porque las circunstancias previas al torneo no fueron fáciles. Sentí que había crecido, ya sabes, partido a partido y que mi nivel de confianza fue cada vez más alto en algún momento".

Sinner ha ganado dos majors y varios torneos más en un año en el que ha sufrido solo cinco derrotas, pero siente que todavía hay margen de mejora en su juego.

Dijo: "He tenido muchas victorias importantes esta temporada. Comenzar con Australia y jugar tan bien allí me dio confianza hasta ahora: “El trabajo nunca se detiene. Sé que todavía puedo mejorar. Como hemos visto hoy, hay un par de cosas. Hay que estar orgulloso de lo que uno tiene. El resto hay que ir a por ello y trabajar para conseguirlo".