El excentrocampista del Arsenal está muy orgulloso de jugar para su país, pero cree que habría hecho más de los 10 partidos que jugó si hubiera representado a otro equipo, porque la competencia por su puesto en ese momento era muy feroz.

Así lo explicó a la revista FourFourTwo: “Jugar para mi país fue mi momento de mayor orgullo. Probablemente, el único arrepentimiento que siempre tendré es que desearía haber sido internacional con más partidos, pero Alan Shearer fue uno de los mejores jugadores que jamás haya jugado para Inglaterra y solo ganó una medalla de la Premier League, así que no me puedo quejar: obtuve más medallas jugando para mi club”.

“Al principio me peleé un poco con Glenn Hoddle por Eileen Drewery, pero llegó Kevin Keegan y era un entrenador totalmente diferente, muy bueno con los jugadores. Sven tenía grandes centrocampistas en ascenso, como Frank Lampard y Steven Gerrard, y Paul Scholes todavía estaba en el equipo y era más joven que yo, así que siempre fue difícil entrar en el equipo, y estaba David Beckham, que jugó 115 partidos. Si yo jugaba en el mediocampo derecho, no tenía ninguna posibilidad de jugar delante de él. Si hubiera jugado para Irlanda o Escocia, probablemente hubiera jugado 100 partidos, pero disfruté mucho jugando para Inglaterra”, añadió.

Y Ray también disfrutó de su tiempo libre con el equipo: “¡Ganamos mucho dinero jugando a las cartas! Jugué con Teddy Sheringham, Dennis Wise y Jamie Redknapp. Teddy era difícil de vencer, era un jugador de póquer, y Dennis también era bueno. También había un par de jugadores malos, a los que se les podía robar todo el dinero. Michael Owen no era el mejor. Alan Shearer era como Papá Noel. Todo era muy divertido”.