El entrenador escocés se hará cargo de su primer derbi de Merseyside desde que regresó a los Toffees en el partido de la Premier League del miércoles y tiene como objetivo intentar que el club vuelva a estar a la altura de sus grandes rivales.

"Hay una brecha entre los dos equipos, y todos son conscientes de las dificultades que ha tenido este club. La brecha entre los dos equipos en este momento probablemente ha sido tan grande como lo ha sido durante mucho tiempo. Así que es algo que tengo que superar y comenzar a acercar a los dos clubes. Pero siempre recuerdo mis últimos dos años, cuando terminamos por encima del Liverpool en la liga dos veces. Nos llevó unos cuantos años prepararnos y estar listos. Tenemos algunos años por delante antes de que estemos listos para competir con el Liverpool nuevamente”, comentó.

El partido, que se pospuso en diciembre debido a la tormenta Darragh, será el último derbi de Merseyside que se llevará a cabo en Goodison Park antes de que el Everton se mude a su nuevo estadio la próxima temporada y Moyes está pidiendo una atmósfera "intimidante" en el tan querido lugar: "Goodison es un ambiente realmente intimidante y un lugar difícil para jugar. He tenido algunas noches geniales aquí como entrenador. El Liverpool siempre ha sido un oponente difícil, pero en Goodison siempre me ha resultado mucho más fácil porque tenemos una fantástica afición detrás nuestro y este partido no será diferente".