El legendario centrocampista de 40 años, que se unió al equipo español siendo adolescente y se marchó en 2018 para jugar en el Vissel Kobe japonés, colgó las botas el año pasado y, aunque se le ha propuesto ser entrenador en su antiguo club algún día, insistió en que no es algo en lo que esté pensando ahora mismo, aunque le gustaría seguir los pasos de algunos de sus antiguos entrenadores.

Declaró a la revista FourFourTwo: "Sé que mucha gente espera que entrene al Barça algún día, pero ahora mismo no pienso en eso. Es una gran responsabilidad, sobre todo porque estoy empezando. Por supuesto, es mi casa y espero volver algún día; ya veremos en qué puesto y cuándo. Sería precioso". Guardiola, Xavi, ¿y luego Iniesta? Sí, suena bien”.

Aunque al español le hubiera gustado seguir jugando hasta la vejez, no se arrepiente de retirarse cuando lo hizo: “Hace unos meses me retiré después de un año jugando para el Emirates Club en la UAE Pro League. ¿La palabra que define cómo me siento con mi carrera? Orgullo, por haber trabajado duro hasta el último entrenamiento. El resto es historia: títulos, derrotas, buenos y malos momentos. Pero lo que destaca es nunca rendirse. Hubiera jugado hasta los 90, pero estoy feliz de haber cumplido el sueño de ser futbolista. Estoy en paz.”