El campeón de la Commonwealth, que se enfrentará a Gerome Warburton por el cinturón vacante del campeonato británico de peso medio, espera que la Escuela Roade de Northampton tenga algún día un motivo para rendirle homenaje, ya que el centro educativo ya honró a otro exalumno, el velocista olímpico Derek Redmond.

Declaró a la revista Boxing News: "En mi antiguo colegio está el 'Salón Redmond' y me encantaría que un salón llevara mi nombre, o incluso solo el comedor. Me encantaría que fuera el Comedor Conway".

El deportista de 28 años cree que ha tenido mucho que celebrar en su carrera hasta ahora, por lo que cree que es un buen ejemplo del poder del trabajo duro.

Comentó: "Nunca fui un aficionado excepcional. Ni siquiera llegué a una final nacional, pero he participado en dos carteleras preliminares de Canelo, una de pago por evento de Anthony Joshua, peleé en el jardín trasero de Eddie Hearn durante el confinamiento y creo que mis últimas 10 peleas han sido televisadas.

Tengo momentos de asombro en los que me detengo y pienso: 'De verdad que lo hice'. He demostrado que es posible si te esfuerzas y haces las cosas bien".