La gimnasta estadounidense fue privada de la medalla que ganó en la competencia de suelo femenino en los Juegos Olímpicos de París el año pasado en medio de una disputa por la puntuación, y habló sobre el devastador impacto mental de ver truncado el sueño de su vida.
Chiles declaró a ESPN: "Todavía me cuesta hablar de ello. Hace seis meses, no podía moverme. Estaba atrapada en mi cama. Estaba mentalmente destrozada, mentalmente no estaba bien.
Chiles subió al podio en el evento el pasado agosto, pero posteriormente fue relegada al quinto puesto después de que las atletas rumanas Ana Barbosu y Sabrina Voinea lograran apelar con éxito la puntuación de los jueces y hablaran del trastorno emocional que sufrió tras la retirada de la medalla”.
La atleta, que afirma que aún no ha devuelto el bronce, explicó: "Todavía puedo sentir la alegría y la felicidad que sentí cuando gané la medalla de bronce. Estaba feliz de poder subir a ese podio con Simone (Biles) y Rebeca (Andrade) porque era el sueño de toda la vida de una niña. Pero ahora, hay días que no puedo pensar así”.
Chiles y sus abogados siguen luchando contra la decisión de despojarla de la medalla, y ella reveló que consideró dejar la gimnasia para siempre después de la disputa: "Pensé, ‘no hay manera de que vuelva a competir en una pista de competición'. Me van a revisar. La gente va a gritar locuras. La negatividad seguirá aumentando".