El extremo de 33 años regresó este verano a su antiguo club, donde ayudó al club a ganar los tres primeros de ocho títulos de liga consecutivos en su juventud, y espera ayudarlos a cambiar su suerte tras no ganar la liga suiza desde 2017.

Declaró a la revista FourFourTwo: "Fue realmente especial volver a casa. Me encanta estar aquí todos los días para entrenar y jugar en un estadio maravilloso frente a mi familia y la increíble afición, que se merece celebrar algo de nuevo. Mi objetivo es que el club vuelva a estar donde debe estar, ganando títulos y disfrutando de las noches europeas".

“Sigo siendo el mismo jugador, pero con más experiencia y madurez, y estoy intentando transmitir esa mentalidad ganadora a los jóvenes. Es importante que entiendan lo que significa jugar en el FC Basilea”, abundó.

Xherdan admitió que una de las razones por las que dejó el fútbol internacional el verano pasado, con 125 partidos con Suiza, fue centrarse en el Basilea: "Era el momento adecuado para dejar la selección, porque quiero centrarme solo en el Basilea. Han pasado ocho años desde que ganaron la liga y lo daré todo para que el club vuelva a estar ahí. Hemos ido por buen camino, pero aún queda mucho trabajo por hacer. También estoy contento de tener más días libres cuando llegue el parón internacional".