El gigante automovilístico alemán, conocido por modelos como el Beetle y el Golf, está trabajando en un acuerdo multimillonario que permitirá a la compañía de automóviles clásicos utilizar la tecnología de automóviles eléctricos utilizada en la marca de superdeportivos que intenta competir con la empresa similar de Elon Musk.

El acuerdo permitirá a VW invertir mil millones de dólares en el desarrollador de camiones y SUV eléctricos y luego inyectar 4 mil millones de dólares adicionales en los próximos dos años.

Después de su creación en 2009, Rivian aún no ha obtenido beneficios trimestrales. Por ejemplo, en los primeros tres meses de este año, informó una pérdida de mil 400 millones de dólares.

Tras la noticia, el precio de las acciones de Rivian subió un 50 por ciento.

VW no es una excepción a este temor, ya que se ha visto afectado no sólo por la competencia de Tesla sino también de BYD, con sede en China, a medida que la industria en general intenta alejarse de los automóviles que funcionan con combustibles fósiles.

Muchas marcas de vehículos eléctricos han tenido dificultades para pasar a líneas de productos más limpias.

El desarrollo se produce cuando la competencia es cada vez más intensa entre los fabricantes de vehículos eléctricos y los países occidentales para imponer aranceles a los vehículos importados de China.

La Unión Europea anunció planes para aumentar los aranceles sobre los productos chinos hasta en un 38 por ciento. Las conversaciones entre los dos organismos están en curso y se espera que finalicen el 4 de julio.

Lin Jian, portavoz de Asuntos Exteriores de China, calificó la medida como 'un caso típico de proteccionismo' y advirtió que dañaría 'la cooperación económica y comercial entre China y la UE y la estabilidad de la cadena mundial de producción y suministro de automóviles'.

El Ministro de Transporte alemán, Volker Wissing, comentó que los impuestos que entrarían en noviembre amenazaban con una 'guerra comercial'.

Escribió en X:

'Los aranceles punitivos de la Comisión Europea afectan a las empresas alemanas y a sus principales productos'.