La Comisión Europea pidió al gigante tecnológico que abra su cartera después de una batalla legal de ocho años, que comenzó en 2016 después de que la empresa fuera acusada de obtener ventajas fiscales injustas de Irlanda entre 1991 y 2014.

El gobierno irlandés, que negó la demanda de la UE, ahora está respetando la sentencia, mientras que Apple admitió que estaba 'decepcionada' con la decisión de los Tribunales de Justicia Europeos después de que el tribunal inferior revocara en 2020 un fallo de la Comisión que intentaba tomar medidas drásticas contra las empresas multinacionales que abusaban de las lagunas fiscales.

Un portavoz dijo:

'Este caso nunca ha sido sobre cuántos impuestos pagamos, sino sobre a qué gobierno estamos obligados a pagarlos. Siempre pagamos todos los impuestos que debemos dondequiera que operamos y nunca ha habido un acuerdo especial. La Comisión Europea está tratando de cambiar retroactivamente las reglas e ignorando que, como lo exige el derecho fiscal internacional, nuestros ingresos ya estaban sujetos a impuestos en los Estados Unidos'.

El portavoz continuó:

'Estamos decepcionados con la decisión de hoy, ya que anteriormente el Tribunal General revisó los hechos y anuló categóricamente este caso'.

En la sentencia, el TJUE dijo:

'El Tribunal de Justicia emite una sentencia definitiva en el asunto y confirma la decisión de la Comisión Europea de 2016: Irlanda concedió a Apple una ayuda ilegal que Irlanda está obligada a recuperar'.