Durante una visita a las oficinas de Google, apenas este 22 de octubre, le mostraron un nuevo software que la compañía cree que dará 'seguridad adicional para miles de millones de personas, incluidos los londinenses'' antes, durante y después de un robo de teléfono.
El alcalde de 54 años vio cómo se ha desarrollado una herramienta impulsada por IA, Theft Detection Lock, que puede detectar cuándo un dispositivo ha sido robado y huido, y cuando se activa, puede bloquear la pantalla para evitar que el ladrón acceda a ella.
También vio cómo los usuarios de teléfonos Android tienen la opción de ocultar aplicaciones sensibles detrás de un área separada bloqueada con PIN, mientras que Google ha creado otra herramienta que permite a los usuarios bloquear de forma remota su dispositivo con su número de teléfono en caso de pérdida o robo.
El alcalde dijo a Standard.co.uk:
'Acojo con agrado el progreso que ha logrado Google. Han aceptado el reto que les planteé a las compañías telefónicas el año pasado, que era que debían hacer más para intentar eliminar el crimen. El año pasado utilicé como ejemplo el progreso logrado con el robo de equipos de sonido en los automóviles, o de navegadores TomTom, etc'.
El funcionario continuó:
'Han aceptado ese reto utilizando IA, utilizando sensores. Eso significa que si tienes un teléfono Android y descargas este software, si alguien te roba o hurta el teléfono, Dios no lo quiera, ese teléfono es casi inútil para el ladrón o el asaltante. Tus datos están protegidos, pero tú, como usuario, tienes una forma sencilla de desactivar tu teléfono y asegurarte de que no se use o de que no roben tus datos'.
También destacó:
'En realidad, quiero, como premio final, que los teléfonos robados de segunda mano sean completamente inútiles, que las piezas no sean utilizadas por delincuentes organizados y otros, y es por eso que quienes fabrican teléfonos -las compañías de telefonía móvil- necesitan hacer aún más'.
Y concluyó:
'Al mismo tiempo, la policía está trabajando muy duro para localizar los puntos conflictivos de la delincuencia, para perseguir a los delincuentes organizados y para acabar con quienes roban o intentan robar teléfonos. Es un esfuerzo conjunto entre la policía y las compañías telefónicas'.