El presidente saliente pronunció su último discurso público desde la Oficina Oval de la Casa Blanca esta semana, y utilizó su discurso para hablar de la desinformación y de "una oligarquía" en Estados Unidos.

"Hoy en día, está tomando forma en Estados Unidos una oligarquía de extrema riqueza, poder e influencia que literalmente amenaza toda nuestra democracia, nuestros derechos y libertades básicos y una oportunidad justa para que todos salgan adelante”, explicó.

El político de 82 años hizo referencia a las advertencias del presidente Dwight Eisenhower sobre un "desastroso aumento de poder fuera de lugar" en el complejo militar-industrial".

Biden agregó: "Seis décadas después, estoy igualmente preocupado por el posible aumento de un complejo industrial tecnológico que también podría representar peligros reales para nuestro país".

Aunque elogió al liderazgo tecnológico de Estados Unidos por cambiar la vida de las personas para mejor y continuar innovando, todavía expresó sus preocupaciones.

Dijo que "una peligrosa concentración de poder en manos de unas pocas personas ultrarricas" podría tener implicaciones preocupantes "si su abuso de poder no se controla".

"Los estadounidenses están siendo enterrados bajo una avalancha de desinformación que permite el abuso de poder. La prensa libre se está desmoronando. Los editores están desapareciendo. Las redes sociales están renunciando a la verificación de hechos. La verdad está sofocada por mentiras que se dicen para obtener poder y ganancias”, agregó.

Biden no nombró a nadie en particular en su discurso.

En las últimas semanas, el jefe de X, Elon Musk, un partidario declarado del presidente electo Donald Trump, ha desempeñado un papel de liderazgo en la administración entrante.

Y el jefe de Meta, Mark Zuckerberg, cuya empresa es dueña de Facebook, Instagram y Threads, confirmó recientemente que su empresa está abandonando la verificación de datos por parte de terceros en todas sus plataformas en Estados Unidos.